Hipérico

                                 

       El hipérico es una hierba que crece casi en todos los tipos de terrenos, como pueden ser prados, terrenos de cultivos, márgenes de los caminos, lugares de montes bajos, sus abundantes flores,  de color amarillo, son muy pequeñas, pero aporta una gran generosidad en la belleza de los campos, y su reconocimiento como tal es inconfundible, por la gran ramificación de sus tallos erguidos, y hojas alteras, de forma muy cesible, y moteadas de una multitud de puntos rojos, que son los que la hace ser tan lucida; también quiero expresarme, que para mejor identificación, de esta planta, la pueden observar en la foto adjunta, que con ese fin fue conseguida, sus frutos son unas capsulas muy pequeñas, las que contienen cada una de estas varias diminutas semillitas.

        Las sumidades de estas plantas, se recolectan, cuando se encuentran en plena floración, y después de pasar por un proceso de secado, en lugar asombrado, con buna ventilación, y libre de humedades, y que  estos almacenamientos, estén acondicionados para que sus temperaturas no excedan, de los 25 a 35 grados, como máximo.

   

         Los principales contenidos activos, del hipérico, en su época de floración, en viperina, pueden superar hasta el 15%, así como el taníno, glucósidos, y vitamina P.

       El hipérico es un sedante de acción suave,  regulariza l acción  biliar, y es un buen anti-inflamatorio, por lo que es muy eficaz en sus aplicaciones en las inflamaciones crónicas de estomago, hígado y del riñón.

       Los aceites de hipérico, especialmente se obtienen, de sus flores, y son muy eficaces, en su aplicación, sobretodo en todo tipo de quemaduras, bien sean producidas por el sol, rozaduras, o el fuego, y contra las hemorroides.

       Estos productos, pueden ser aplicados en infusiones, al igual que se hace con el té, manzanilla, tilas y otros tipos de hierbas, pero siempre se ha de hacer, bajo los consejos del medico, o personas especializadas, en las dosificaciones de la medicina natural, para que así se puedan evitar, las posibles intoxicaciones, por sobre dosis, o que pudieran producir algún tipo de alergia, que seria muy natural, al percibir las sustancias de cualquier hierba que posean las características del hipérico.

       La floración de estas plantas, sobretodo en las costas de la cuenca mediterránea, tiene lugar entre los meses de Mayo a Julio, ambos inclusive.